5J CONSTRUCCIONES
Cuando se trata de diseñar o renovar un cuarto de baño, una de las decisiones más importantes es elegir entre un plato de ducha o una bañera. En los últimos años, los platos de ducha han ganado popularidad debido a sus numerosas ventajas en términos de funcionalidad, estética y mantenimiento. En este artículo, exploraremos por qué es mejor optar por un plato de ducha en lugar de una bañera y ofreceremos algunas recomendaciones útiles al respecto.
I. Espacio y funcionalidad:
Ahorro de espacio: Los platos de ducha ocupan considerablemente menos espacio que las bañeras, lo que es especialmente beneficioso en cuartos de baño pequeños o en áreas donde se necesita aprovechar al máximo el espacio disponible.
Accesibilidad: Los platos de ducha son más accesibles que las bañeras, ya que no requieren que las personas se suban o bajen de ellas. Son ideales para personas mayores, con movilidad reducida o discapacidades, ya que facilitan el acceso y reducen el riesgo de caídas.
Rapidez y comodidad: Las duchas son más rápidas y prácticas que los baños en remojo. Permiten una limpieza rápida y eficiente, lo que resulta especialmente útil en situaciones de prisa o cuando varias personas utilizan el mismo baño.
II. Mantenimiento y limpieza:
Fácil limpieza: Los platos de ducha son más fáciles de limpiar que las bañeras, ya que no requieren un mantenimiento tan exhaustivo. La superficie lisa y plana de un plato de ducha facilita la eliminación de residuos, evitando la acumulación de suciedad y moho.
Prevención de humedades: Las bañeras suelen ser propensas a fugas y filtraciones de agua, lo que puede provocar problemas de humedad en el suelo y las paredes circundantes. Los platos de ducha, por otro lado, están diseñados con sistemas de impermeabilización adecuados para prevenir estos problemas.
III. Estética y diseño:
Versatilidad estética: Los platos de ducha ofrecen una amplia variedad de opciones de diseño, desde acabados en cerámica hasta superficies de piedra natural o sintética. Esto permite adaptar el estilo del plato de ducha al resto del baño y lograr una estética cohesionada.
Modernidad y tendencia: Los platos de ducha se asocian con un estilo de baño moderno y contemporáneo. Su aspecto minimalista y elegante puede contribuir a la sensación de amplitud y luminosidad en el espacio.
Recomendaciones:
Elige el tamaño adecuado: Asegúrate de seleccionar un plato de ducha que se ajuste al espacio disponible en tu cuarto de baño, teniendo en cuenta las dimensiones y la distribución del área.
Considera la pendiente y el desagüe: Asegúrate de que el plato de ducha tenga una pendiente adecuada para el drenaje del agua y que cuente con un sistema de desagüe eficiente.
Instala una mampara o cortina de ducha: Para evitar salpicaduras de agua y mantener el resto del baño seco, instala una mampara de ducha o una cortina impermeable.
Añade elementos de seguridad: Incorpora elementos como barras de agarre y antideslizantes en el plato de ducha para garantizar la seguridad, especialmente para personas con movilidad reducida.
Conclusión: Optar por un plato de ducha en lugar de una bañera es una elección inteligente en términos de funcionalidad, mantenimiento y estética en el cuarto de baño. Los platos de ducha ofrecen una mayor versatilidad, ahorro de espacio, accesibilidad y facilidad de limpieza. Considera las recomendaciones mencionadas anteriormente al elegir y diseñar tu plato de ducha para aprovechar al máximo estos beneficios. Recuerda que siempre es recomendable consultar a profesionales especializados en la instalación y diseño de cuartos de baño para obtener resultados óptimos.